Por Yago,
No son pocas las ocasiones en que algunos de vosotros por privado me pedís recomendaciones de un intraauricular (inear/iem como dirían los anglosajones) que funcione bien con todo tipo de música y si es posible desde el smartphone.
En esta tesitura los modelos con driver dinámico parten con una cierta ventaja sobre los «balanced armature» debido a que por norma general, siempre hay excepciones, suelen ser menos críticos y exigentes con la fuente.
Radius nos trae una propuesta muy interesante, y con una configuración distinta a lo que habitual podemos ver. Sería más justo referirse a doble diafragma que a «doble driver» como dice el breve extracto del título. Uno de ellos de cerámica piezoeléctrico para las frecuencias altas y un diafragma con baño de Berilio para el resto de gama de frecuencias.
Link del fabricante: http://www.radius.co.jp/en_product/hp-twf41/
Link Musica Acoustics (envío a España disponible con almacén en EU):
http://www.musicaacoustics.com/_p/prd1/4512728481/hp-twf-41-no4-radius
La tecnología está ahí, y los japoneses lo saben hacer muy bien. No es tarea sencilla el hacer sonar de manera tan coherente dos drivers en esta disposición, uno enfrente del otro, y más si cabe sabiendo que sus materiales son distintos.
De hecho sin ver el papel uno puede llegar a pensar que está escuchando un multidriver «balanced armature». La ausencia de «edulcorado» en el medio grave, junto con la ligereza y rapidez mostrada en el sonido los convierte en un modelo muy apropiado para acústica, vocal, pop e incluso clásica.
No son completamente planos, y tienen predilección hacia los medios, sin llegar a ser catalogados como «mid-centric». De rápidos contrastes y con de velocidad destacada en transitorios los Radius tienen una gran capacidad técnica para tratarse de un iem dinámico, compitiendo de tú a tú con modelos multidriver y en general con un nivel de precisión equiparable a híbridos destacados por ello de similar gama de precios, como pueden ser los Dunu DN-2000J; que a priori suenan más en «V» y con un agudo más presente.
Los graves son más definidos que contundentes, con buen articulación y textura, si bien no destacan por ofrecer mucha información en la parte del sub-grave. No obstante es una típica característica del sonido japonés.
La «magia» ocurre bajo la estrecha relación de los medios y la escena sonora, apartado estrella en el sonido de estos Radius. Contando con una excelente separación estéreo, los medios se proyectan de manera amplia, clara y precisa en una imagen sonora que se extiende más a lo ancho. Si a esto le unimos un timbre creíble y unos agudos nada hirientes y controlados, creo que es un modelo a lo que los amantes del pop y música vocal en general deberían tener en cuenta. Sobre todo porque se dejan escuchar perfectamente desde un teléfono móvil sin mayor dificultad, ya que los 32 Ohm de impedancia y una sensibilidad de 108 dB lo permiten.
Después de hablar de lo mejor de estos auriculares, que sin duda es su sonido, comentemos los otros aspectos importantes de un iem.
La construcción es íntegra en plástico, bajo un bonito color granate se esconden aspectos que son mejorables. Es probable que más de uno de vosotros conozca exitosos modelos de coches, admirados por puristas y fanáticos en los que el motor o el chasis era donde realmente se veía la inversión realizada. Bien pues este puede ser un caso similar a los Radius, su sonido y arquitectura interna sorprenden, pero no se puede decir de igual manera del exterior.
El cable es deconectable mediante conector MMCX, y si bien durante mis pruebas he utilizado la mayor parte del tiempo el Ortofon EC7-S que se ofrece en pack si se desea en Musica Acoustics, la dureza de la conexión/desconexión era muy alta, requeriendo de un esfuerzo considerable, que quizás se mitigue con el tiempo. Así mismo y acostumbrado a ver cápsulas de metal o más elaboradas, deja un ligero sabor agridulce a nivel constructivo.
No es que el plástico sea un mal material, pero creo que las sensaciones en la mano ya son importantes en este nivel de precios.
A favor juega su mayor resistencia a impactos y ligereza. Sí, aunque incluso en persona parezca difícil de creer en primeras impresiones, los Radius son unos iem sólidos, a los que le falta una vuelta de tuerca a nivel de diseño para ser incluso mejores de lo que son. Porque el sonido merece realmente la pena.
Gracias a todos y hasta la próxima review, más pronto que tarde,
Yago.