Por Yago,

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Sony ha renovado recientemente su conocida gama XB «Xtra Bass». Los XB-910 representan ahora el nuevo tope de gama en esta línea de auriculares Sony.

El propio nombre de esta gama nos puede llevar a pensar el sonido que vamos a obtener con estos auriculares, es decir, una gran dosis de frecuencias bajas. Tratando de posicionarlos como una clara alternativa a los conocidos Beats, Sony les otorga una buena portabilidad, diseño y aislamiento.


Apariencia y accesorios

 

La estética es una de las prioridades en este modelo. Construído en su mayor parte en plástico de buena calidad con un acabado pulido y brillante, consigue transmitir sensación de solidez, aunque no está al nivel de otros rivales.

A pesar de tener un peso bastante considerable (305 g) son totalmente plegables, de esta manera podemos llevarlos dentro de nuestra mochila sin mayor problema, ya que Sony desafortunadamente no incluye una bolsa de transporte con estos auriculares, algo que se echa en falta sin duda, dadas las pretensiones de uso urbanas.

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La apariencia es muy llamativa, y a pesar de ser supraurales las copas tienen unas dimensiones generosas para albergar a los drivers de 50 mm. Se incluyen de serie dos cables planos desconectables y con función de bloqueo, libres de enredos y microfonías. Uno de ellos consta de un control remoto universal para dispositivos móviles.

El aislamiento ofrecido por las almohadillas con «memory foam» es excelente al igual que la comodidad. Es necesario un correcto ajuste para obtener la máxima insonorización del exterior así como una correcta respuesta de los graves, pero una vez bien situados es muy fácil pasar largas escuchas con ellos sin ninguna molestia.

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El acabado tan brillante de las copas es claramente intencionado para simular al aluminio, he de decir que si de mí dependiera habría optado por un acabado mate en vez de este, aunque en conjunto resulta bastante vistoso. Las piezas rotativas de las piezas son de buena calidad y no se aprecia ningún crujido ni sonido extraño cuando manipulamos los auriculares. Sin duda alguna es un auricular dirigido a un público joven.

 

Especificaciones técnicas

 

Tipo cerrado
Estilo de uso Tipo supra aural
Tipo dinámico
Unidad de diafragma (mm) 50 mm
Imán
Capacidad (mW) 3.000 mW
Diafragma
Frecuencia (Hz) 3 – 28.000 Hz
Sensibilidad (dB/mW) 106 dB/mW
Impedancia (Ohmios) 24 Ω a 1 kHz
Control de volumen
Tipo de cable 2 cables (cable de conexión / cable de mando a distancia y micrófono integrado)
Longitud de cable (m) Cable de conexión, cable de mando a distancia y micrófono integrado: 1,2 m
Enchufe Minienchufe estéreo en forma de L bañado en oro (cable de conexión) / Minienchufe estéreo de cuatro conductores bañado en oro con forma de L (cable de micrófono y mando a distancia integrado)
Peso (g) Aprox. 305 g (sin cable)

 

Sonido

 

Para esta valoración me he centrado en mi equipo portátil ya que es el que casa mejor con las pretensiones de este auricular.

Consta de:  HTC One + HRT MicroStreamer (Dac+ampli)

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Las siglas que hacen referencia a este modelo de la gama «Xtra Bass» quedan perfectamente reflejadas en su sonido, los graves están realmente presentes. El perfil es claramente en «V» y bastante acentuado, las frecuencias bajas toman el protagonismo en casi cualquier canción, con una pegada y cantidad contundentes.

No obstante el control de estas frecuencias  está bastante bien logrado teniendo en cuenta que se trata de un auricular sólo apto para «basshead», o amantes del grave traducido al castellano.

El medio-grave asume gran parte del impacto e inevitablemente influye en las frecuencias medias sobre todo. Con música electrónica, hip-hop o house estos auriculares tienen un buen rendimiento, quizás sean los géneros para los que estan pensados y en los cuales este grave desbordante no desentona, beneficiando incluso a la base rítmica de la canción, transportándonos directamente a unos palmos de los altavoces de una discoteca.

Cuando escucho canciones con gran predominio vocal echo en falta unos medios más transparentes y claros, las voces suenan algo lejanas y retraídas y aunque con una buena definición debido al empuje de las frecuencias graves llegan a sonar bastante veladas, es por esto que no lo recomendaría como auricular para géneros vocales, en este aspecto hay auriculares que consiguen bastante mejor nivel que los XB910.

Antes mencionaba que el perfil de este auricular es en «V» pero si hilamos fino la gráfica de respuesta en frecuencias se parecería más bien a una «L». Esto es debido a que a los medios y agudos a pesar de tener un buen timbre no están nada pronunciados sobre todo si los comparamos con las frecuencias graves, los agudos son dulces sin seseos ni asperezas, quizás sea lo que más me gusta de estos auriculares.

En términos de escena sorprende la amplitud y la recreación que se consigue a pesar del poco fondo de las copas, en este aspecto las pequeñas ranuras de ventilación seguro que tienen algo que ver. La separación instrumental es correcta, y aunque no llega a igualar a un buen auricular de estructura abierta, sí se sitúa al nivel de los Sony MDR-1, auricular del que pude disfrutar no hace mucho tiempo.

 

CONCLUSIONES FINALES

 

Los Sony MDR-XB910 son unos auriculares enfocados hacia un público joven, con una gran consideración de la estética y el estilo. Si eres una amante de los graves por encima de todo y necesitas aislamiento es una opción a considerar, no obstante los Sony MDR-1 son para mí unos auriculares más capaces, y con un sonido más equilibrado.

Tienen un PVP oficial de unos 200 euros, pero se pueden conseguir nuevos por unos 160 euros.

Agradecimientos especiales a Beatriz del departamento de marketing de Sony por hacer posible esta review.

 

Gracias por la lectura.

 

 

 

 

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