Puntuaciones
Ya no es el primer iem de esta marca alemana que analizo, y es que Vision Ears siempre tendrá un puesto importante en esta afición, y en particular en mi relación con la misma, dado que los VE6 X-Control fueron mis primeros custom iem.
Desde el lanzamiento de los VE8 siempre he tenido una curiosidad innata por su fama de excelente rendimiento en vocal, algo que valoro mucho en cuanto al desempeño de un iem. De toda la gama de los universales que Vision Ears ofrece, los VE8 se sitúan en el último escalón y más caro, con un coste de 2.150€, ofreciendo ya la típica arquitectura multidriver BA, que veíamos en sus hermanos de gama, como los propios VE6.
Antes de lanzarme de lleno en el análisis de estos iems, quisiera puntualizar que la marca ofrece la posibilidad de realizar los VE8 en formato custom iem (a medida). Las impresiones que expondré se limitan a la versión universal, y si bien tanto la estructura interna como componentes son idénticos en ambas versiones, dada la mayor capacidad de aislamiento que ofrece un custom iem, la experiencia sonora podría variar ligeramente.
El «unboxing» y presentación
En el apartado de presentación Vision Ears no escatima, y ofrece sin duda un «packaging» a la altura de su PVP. Siguiendo las líneas sobrias que ya podíamos ver en presentaciones de otros modelos, la caja exterior rectangular tiene una tapa magnética, que deja a descubierto una funda circular, realizada en metal, con un estético grabado a láser con el logo de la marca.
Antes de que alguien se lo pregunte, porque quizás pueda sorprender, los Vision Ears VE8 que veis en las imágenes, no son una unidad cualquiera… se trata de un acabado exclusivo de lanzamiento, escogido por la propia marca entre otros acabados, y lamentablemente ya no disponibles para la gama universal.
Si alguno se queda con las ganas de personalizar, y al igual que con el resto de la familia «VE», se ofrece siempre la posibilidad de ir por el camino custom, donde podréis escoger y «tunear» el acabado de vuestra unidad, con infinidad de combinaciones, para hacerlos únicos e inigualables.
El diseño
Pese a encapsular 8 drives por lado, los VE8 son tan cómodos como todos los hermanos de gama que he probado. El extra de drivers los obliga a aumentar la voluminosidad de cada cápsula, si bien y dado el inteligente reparto de formas, se siguen adaptando a mis orejas como un guante.
Y es que Vision Ears es conocida por dar a sus modelos universales, una apariencia casi idéntica a sus homólogos custom; aquí sale a la luz la veteranía al ser una marca nacida en el mundo profesional, siempre encima de los palcos; algo que sin duda está unido a mi profesión.
Cuando uno conoce desde dentro cómo es la frenética actividad de un espectáculo en vivo, y el muchas veces poco cuidado que se tiene con el material, se da cuenta de que estos iems están hechos para durar. Y es que el nivel de exigencia en cuanto a calidad y resistencia que se necesita/pide en el mundo profesional, dista y mucho del uso que cualquier usuario le pueda dar en casa o por la calle.
Las cápsulas siguen elaborándose con resina acrílica, mucho más resistente frente al deterioro y tinciones amarillentas propias de las siliconas. Personalmente soy muy partidario de este tipo de materiales, los cuales además están elaborados con la biocompatibilidad siempre en mente, para evitar cualquier posible alergia.
Al igual que en los EVE-20 que analicé hace unos meses, el cable incorporado en los VE8 es un fino pero práctico entrelazado de 4 conductores de cobre bañados en plata de alta pureza; todo ello acabado en conectores de 2 pin para cada cápsula y jack recto de 3,5mm.
La terminación de esta unidad en concreto está basada en un cuerpo azul eléctrico con un alto grado de transparencia, que deja a la luz todo el entramado de drivers y crossovers, junto con unos «faceplate» que simulan unos ríos de tinta de azules más acusados y oscuros. Desde luego que no pasarán desapercibidos.
Especificaciones
-Sensibilidad: 120 dB/mW
-Impedancia: 22 Ohms
-Drivers: 8 balanced armature drivers (2 graves, 2 medios, 4 agudos), 3-way passive crossover.
Sonido
Ponerme a escuchar los VE8 fue un ejercicio sencillo a la par que placentero dada la familiaridad con el sonido de la marca; desde hace años disfruto de unos VE6 X-Control como custom de referencia en mi colección, y que por unos o por otras acabo utilizando en la práctica totalidad de mis pruebas.
El perfil de los VE8 no dista demasiado del que ya me ofrecen los VE6, con la diferencia de que todo parece «enfatizado» de principio a fin. Y es que pierden un punto de relajación, para ofrecer un perfil con una focalización y proyección en medios que hasta ahora parecía reservada a orejeros abiertos con drivers de gran diámetro.
Así que de partida son unos iems que sobre todo sorprenderán a los amantes de la música vocal, pero sin olvidar al resto.
La capacidad técnica de estos iems se da la mano con la musicalidad, sobre todo intrínseca en rango medio de frecuencias, plato fuerte de estos iems.
El grave es para mi sorpresa más bien prominente pero con magnífico control para tratarse de un BA, arquitectura con la que resulta complicado aportar esa sensación de pegada, pero estos VE8 lo consiguen. La acentuación , se prolonga hasta el medio-grave, sin llegar a provocar velo alguno en las voces, tan sólo ayudando a dar ese plus de cuerpo y presencia del que estos universales pueden presumir.
En mis oídos los VE8 suenan como unos VE6 «supervitaminados», dejando en parte atrás la comesura en cuanto a pegada de grave, optando por un sonido de más cuerpo, lo cual invita a escucharlos incluso a volúmenes bajos, sin perder coherencia.
Resulta chocante dado el perfil enfatizado en el medio-grave la calidad y transparencia de la zona media, que parece permanecer libre de coloración. Esto en parte se consigue por la buena transición hacia unos medios-altos que resultan igualmente algo exaltados, en el buen sentido de la palabra.
Tras una ligera caída progresiva en su respuesta que parte desde los 2kHz llegando hasta los 5kHz, pasando justo por la zona de «empaste» entre los distintos rangos de frecuencias, vuelven a «cobrar vida», con un pico situado en el entorno de los 7kHz.
Y es que jugando con el balance tonal y el reparto de crossovers Vision Ears consigue con los VE8 que los medios te atrapen, por densidad, proyección, presencia y un realismo propio de los mejores universales dinámicos; todo ello sin olvidar la pizca de sal necesaria en la parte alta, para que violines y triángulos no resulten apagados.
Por otro lado existen ciertas «penalizaciones» o quizás mejor dicho, puntos en los que los VE8 no brillan de tal manera. Uno es la escena, donde sí tenemos una profundidad reseñable pero careciendo de sensación de altura y tridimensionalidad, que sí por ejemplo tenemos con los Elysium.
Esto es fácilmente achacable al perfil intimista que una zona media tan frontal y proyectada aporta al oyente, un peaje a pagar que no resultará desagradable bajo ningún concepto, dado que las cualidades lo compensan con creces.
El aspecto más discutible para mí, es el énfasis hacia los 7kHz, zona algo delicada para las personas que como yo tienen sensibilidad a un agudo excesivo. En general estos VE8 no se puede decir que lo tengan, pero el ligero pico es bastante evidente con algunos géneros; para la mayoría de usuarios no supondrá mayor problema, e incluso disfrutarán del extra de claridad que ello aporta; pero sí resulta un aspecto a considerar para aquellos que no sean tan «treblehead».
Por lo demás la zona aguda muestra una capacidad técnica a la altura del precio, con gran extensión (aunque no tan brillante como los Elysium), y libre de «grano».
Conclusiones
Como máximo exponente de la gama «VE Line», los VE8 me han sorprendido con un perfil que no los hace pasar desapercibidos. Podría decirse que son los iems más «cañeros» de todos los que he probado dentro de Vision Ears.
Su baza principal está en la coherencia de su respuesta y el espectacular rendimiento vocal. Son unos iems hechos para disfrutar de la música, en los que se prioriza la presencia y proyección, sobre la suavidad y neutralidad.
Guardando el perfil base de la marca, los VE8 resultan más que recomendables para todo aquel que quiera un iem todoterreno, de gran capacidad técnica y a su vez unos medios densos, propios de los mejores dinámicos.
Si a todo ello le sumamos la calidad de acabados y la garantía de una marca alemana, estamos ante un verdadero ganador.