Por Yago,
Hoy volvemos a Noble Audio, con los que probablemente son los IEM más parecidos a los gustos personales de John Moulton, audiólogo de prestigio y creador de la marca. Con un sonido afinado bajo su batuta, estos son los Savant, edición Wizard.
Como alguno se habrá fijado esta no es una versión estándar de los Savant, de hecho se trata de una de las ediciones limitadas y exclusivas denominadas como Wizard. En su interior no cambia nada, se trata de la misma configuración, pero el look exterior está totalmente personalizado, con una calidad de acabados y atrevimiento en los motivos de sus estampados que hacen in innegable guiño a la gama custom de Noble, donde son los reyes en cuanto a espectacularidad en sus diseños, sin duda.
Distintos tonos rojizos, morados y azules se combinan en esta unidad para dar una apariencia cuanto menos llamativa y que debo decir que en persona lucen espectacularmente bien. Toda la cápsula parece estar hecha de una sola pieza, con suaves curvas y sin signos visibles de uniones. El acabado negro «piano» ponen la guinda al pastel, para esta unidad Wizard. ¿El precio? 799 $ para las versiones limitadas y 599$ para la versión Savant estándar. En este caso la exclusividad hay que pagarla.
El último «encuentro» que he tenido con esta marca fueron los Noble 6, modelo de seis drivers del tipo «balanced armature» que más que bueno diría que me dejaron un excelente sabor de boca, con un rendimiento que los situaba entre los mejor en universal que ha pasado por mis orejas. Así que las expectativas previas que tenía con los Savant no eran precisamente bajas.
Packaging y accesorios
En esta última época Noble ha revisado toda la presentación y embalaje de sus modelos de IEM, algo que se ha visto revertido en una clara mejora general, tanto en una superior calidad de cajas y serigrafiado de las mismas como la incorporación de una funda Pelican 1010 en lugar de la Otter Box. El modelo de Pelican es de los más prácticos y contrastados en el mercado y que por casualidad ya venía utilizando desde hace varios años atrás.
La variedad de tips de distintos tipos y tamaños es la suficiente como para que todo usuario encuentre la apropiada. Entre ellas encontramos un set de tips de silicona rojas y azules en todos los tamaños (pequeño, mediano y grande), distinguiéndose entre ellas por la distinta rigidez algo que afectará ligeramente al sonido. Unas biflange y por último unas de tipo foam que podremos comprimir como las comply.
Afortunadamente y para daros una experiencia más cercana, he realizado un «unboxing» desde cero para que podáis observar todo lo que viene con ellos.
El cable es muy ligero y con cero microfonías. A su vez no tiene memoria y es ciertamente de los más maleables en cuanto a cables de stock se refiere, así que no hay ninguna queja en este apartado. Se hacen cómodos para llevarlos rodeando la parte trasera de nuestras orejas.
Ajuste y aislamiento
Este quizás es uno de los puntos claves en cualquier modelo inear. Sin un buen ajuste es casi misión imposible tener un buen sonido, sobre todo en cuanto a graves se refiere. Los Savant son unos IEM muy compactos y de dimensiones reducidas, algo que juega muy a favor del buen ajuste casi a la primera y de inmediato, una vez seleccionamos la tip adecuada. Posiblemente estemos ante unos de los modelos de IEM más cómodos y con mejor aislamiento del mercado, sin duda.
¿Qué conocemos de su interior?
Sabemos que es un IEM bien construído, con un «shape» que tiene cierta reminiscencia a la magnífica gama custom de Noble, con bornes de conexión del tipo 2 pin lo que abren todo un mundo de posibilidades para los cables custom. Pero desde un principio la compañía no ha querido especificar la configuración en cuanto a su arquitectura de drivers, más allá de que usa «balance armature». Misterio intencionado y que deja en una posición prioritaria al «escuchen y juzguen», sin estar influenciados previamente.
Este misterio no es tal ya, alguien los ha destripado y tras escucharlos os aseguro que no hubiera dicho que se trata «solo» de un dual driver. Esto pone de manifiesto que el buen ajuste del crossover tiene una repercusión bastante mayor que el número de drivers.
Sonido
Cuando uno se pone a escuchar música y el objetivo es disfrutar sobre todo, la tonalidad y eso a lo que llamamos «musicalidad» están por encima de todo. En estos dos apartados los Noble Savant brillan y nos brindan una grata experiencia sea cual sea el tipo de género.
Aquí se refleja en afino «a oído» mediante el cual ha sido perfilado el sonido de estos IEM. Nada suena arisco, todo suena agradable y natural, tanto que en ciertos momentos consiguen que me olvide de que estoy escuchando a un modelo con drivers «balanced armature». ¿Por qué? El timbre final es más bien propio de un buen dinámico, ya que consigue aportar una gran textura y realismo sobre todo en las voces y la zona media.
Los Noble 6 son el último modelo que he podido analizar aquí mismo y las ligeras comparaciones son inevitables. A pesar de tener un hueco de precio importante entre ellos, sobre todo si consideramos la versión estándar de los Savant en lugar de estos Wizard, no diría que los Savant tienen un rendimiento muy inferior. De hecho para determinadas piezas vocales he disfrutado más con estos últimos gracias a una mayor presencia y la situación más adelantada en el plano. Hablando puramente en términos de capacidad técnica es obvio que difícilmente un doble driver iguale a un modelo de seis, pero si no se reproducen piezas complicadas con mucha instrumentación, jugando en escenarios de música acústica en los que una escena más íntima y cercana acompaña más a la canción, no sería una idea descabellada que más de uno se decantara por los Savant. Así de bien están afinados estos IEM.
Sin ofrecer una capacidad quirúrgica para desmenuzar todos y cada uno de los matices y detalles, sobre todo en los extremos de las frecuencias, los Savant consiguen mantener un buen nivel de detalle en la zona más audible lo que los hace parecer más precisos. Gozan de un sonido con un gran equilibrio y un balance tonal de casi sobresaliente.
La zona del subgrave no está tan presente como en los Noble 6, algo que resulta totalmente lógico debido al menor número de drivers, pero tampoco dan la sensación de estar recortando mucho, y la caída es muy progresiva. La ligera y justa elevación de la zona del medio-grave (sobre los 75-100 Hz) es la necesaria para que el sonido gane en cuerpo y peso, dando una buena base para las voces, sobre todo masculinas. Pero también favoreciendo a las femeninas que suenan totalmente plenas, con suficiente aire y la delicadeza requerida.
Los Savant podrían catalogarse en líneas generales como un IEM de sonido ligeramente cálido, en su justa medida, y con tendencia a centrarse en los medios. Estas dos características son clave para gustar de primeras, sobre todo para los que como es en mi caso particular damos una gran importancia a las voces y la naturalidad en su reproducción, bajo estas premisas el flechazo es casi instantáneo.
Alguno puede pensar por mi descripción del sonido de los Savant que nos encontramos ante un IEM algo «velado», pero no es así. John Moulton con sus directrices y oído ha conseguido aportar le chispa necesaria a la zona alta para que nunca suenen apagados y faltos de vida. Esto lo ha conseguido moviendo el énfasis hacia la zona de los 10 Khz donde el oído humano no es tan sensible a los «picos». Un énfasis sutil y bienvenido que consigue crear también una sensación de percibir más aire entre instrumentos.
Esto se combina con una escena que resulta asombrosa para un doble driver, con una coherencia en las tres direcciones del plano digna de IEM con más número de drivers. Y es que el rendimiento de los Savant perfectamente podría competir con muchos de los triple driver y diseños híbridos del mercado con más nombre, sin arrugarse.
¿Fáciles de mover?
Enchufar los Savant a cualquier fuente decente y obtener prácticamente todo su potencial es tarea fácil. El fabricante solo nos da el dato de la impedancia que lo sitúa por debajo de los 30 Ohm. En cuanto a la sensibilidad no hay referencia pero tras mis pruebas diría que se sitúa como poco en torno a los 100 dB. Bien sea desde el RWAK100II o mismo desde mi S6 Edge el rendimiento es muy satisfactorio, siendo un modelo de IEM que no cambia demasiado con las fuentes, siempre mantiene su perfil característico. No obstante y si me tuviera que decantar sería por un reproductor que caiga hacia el lado detallado para equilibrar el ligero carácter cálido de los Savant.
Conclusiones
Podría decirse que los Savant dan una lección a los tecnicismos y a todo aquel que solo escuche en base a las especificaciones, sin opción a más. A pesar de moverme y estudiar en un entorno científico y técnico debo confesar que este modelo de IEM es mucho más de lo que se planta sobre el papel, y viene a seguir la corriente del ajuste a oído que está cogiendo fuerza poco a poco, en un mundo en el que la ciencia y la emoción pueden ir de la mano sin pisarse una a otra. Los 599$ de la versión estándar no es un precio asequible pero sin duda y tras haberlos disfrutado, se puede decir que valen lo que cuestan.
Gracias a todos y hasta la próxima review, más pronto que tarde,
Yago.