Por Yago,
La tecnología de drivers planarmagnéticos ha estado por costumbre, y quizás por falta de evolución, limitada a los auriculares «full size» de ámbito estacionario, aquellos que por razones de peso, dimensiones y estructura abierta, solo queremos usar en casa.
Oppo ha sido la primera compañía en romper esta especie de tradición, con los PM3, el primer modelo planar que también es a la vez cerrado y portátil.
http://www.oppodigital.co.uk/ecommerce/product/pm-3-planar-magnetic-headphones.aspx
No contentos con la innovación que conlleva incorporar la tecnología planar al sector portátil los PM3 aúnan también un diseño moderno, simple y una alta funcionalidad, ya que la propia marca afirma que están pensados para ser movidos directamente desde nuestro smartphone, aunque donde realmente brillarán es bajo las riendas de un DAP dedicado o incluso un equipo estacionario, como explicaré unas líneas más adelante. Si bien es justo reconocer que son disfrutables desde un Iphone o cualquier otro modelo de smartphone con una buena señal de audio, entre los que podría incluir el HTC 10 o el Samsung Galaxy S7 también, por nombrar algunos representantes de última hornada en el mercado.
Packaging y accesorios
Son pocas las compañías que tienen tan bien idealizado lo que es una presentación y «packaging» vistoso pero a la vez sencillo. Desde la caja, los gráficos, hasta los accesorios recuerdan bastante al ecosistema Apple, del que puede que tomaran parte de la inspiración. En general es un auricular que ya desde el primer contacto transmite sensaciones muy «premium», a pesar de que su precio tampoco es tan desorbitado.
Para una experiencia más cercana y casi como en primera persona, hace ya unos días que realicé el vídeo «unboxing» para todos vosotros, así que si os lo habéis perdido os animo a darle al «play».
Diseño
Resulta tarea difícil en un rápido golpe de vista saber de qué compañía provienen estos PM3, el diseño es tan limpio y simplista que Oppo se reserva el logo para los laterales de la estructura que forma la diadema.
La piel auténtica queda reservada para el «flagship» PM1, con el que todo sea dicho comparte una estructura bastante similar pero en abierto, y para este modelo portátil se opta por una polipiel de excelente calidad, con un tacto muy agradable y además fácil de limpiar, pese al color blanco de mi unidad de pruebas en concreto.
Aclarar que en principio están pensados para ser un auricular circumaural/ «over-ear» pero quizás algún usuario pueda tocar con las orejas los bordes de las almohadillas, ya que el espacio ofrecido no es demasiado grande, aunque sí más que suficiente para una persona con un tamaño de oreja estándar, como es mi caso.
Para los que se salgan un poco de la media no creo que existan problemas de comodidad, ya que las almohadillas aparte de suaves están muy acolchadas, y son de los auriculares más cómodos que he podido probar.
La ligereza es un aspecto importante para un auricular de este estilo, y los ingenieros de Oppo han conseguido reducir el peso de los drivers a casi el mínimo que en conjunto arrojan unos muy razonables 323 g, lo que los convierte en uno de los auriculares planar más ligeros en el mercado. No obstante y quizás por dimensiones más que por peso es un auricular que sí llevaría a una biblioteca u otro lugar tranquilo, pero quizás no es el que elegiría para mis paseos por la ciudad.
Para alegría de muchos se incluye una funda semirígida de tipo tela vaquera (se realiza con pantalones reciclados) y las copas tienen la capacidad de rotar 180 grados para volverse totalmente planas, facilitando mucho su transporte.
El cable es desconectable y posee una amigable conexión de jack 3,5mm en una de las copas, con la posibilidad de añadir cables compatibles con dispositivos Android, Apple y Windows. Por supuesto el cacharreo con cables custom a posteriori está asegurado con este tipo de conexión.
Así que en general se puede decir que en el apartado de diseño, construcción y aislamiento, los Oppo PM3 casi rozan el sobresaliente. Quizás no tengan el toque italiano de los Sonus Faber Pryma ni sus exclusivos materiales, pero a cambio ofrecen un mayor comfort y aislamiento, optando más por la funcionalidad, equilibrada con una estética que bajo mi punto de vista es simple, bonita y acertada.
Sonido
Si lo tuyo son los auriculares con respuesta neutra, puede que los PM3 sean una de las mejores opciones que hay ahora mismo en el mercado, no solo en esta franja de precios, que se sitúa en trono a los 530 euros en España, sino también aludiendo incluso a gamas más altas.
Los PM3 gozan de una respuesta en frecuencia casi de libro, que me recuerda en bastantes aspectos a la de los ya míticos Sennheiser HD600, si bien cada uno con sus características peculiares ya que no emplean la misma tecnología de driver, planarmagnético vs dinámico.
Si tuviera que destacar dos aspectos en cuanto a su sonido serían, rapidez en respuesta y fidelidad.
Cada vez que le doy al play parece que estos auriculares no están edulcorando ni enfatizando nada, muestran la música tal y como es, lo que permite también apreciar mejor las diferencias entre las distintas amplificaciones, bien sea hablando de reproductores de altos vuelos o amplificadores portátiles, con los cuales sacan lo mejor de sí.
Si bien dentro de la neutralidad en conjunto tienden a un perfil con un ligero toque en «U». Con una repuesta continua y uniforme desde los 20 hasta prácticamente los 200 Hz la parte del subgrave se puede separar y distinguir con bastante facilidad del medio-grave lo que aporta una gran sensación de limpieza y precisión en la parte baja. Este control también queda patentado en la gran respuesta al impulso de los drivers planar incluidos en estos auriculares.
Mirando la respuesta en frecuencia de Inner Fidelity se puede observar la ligera caída de entre 2 y 3 dB en el rango de los 300 y 650 Hz aproximadamente y que afecta de manera directa a la menor sensación de medio-grave percibida, o lo que se traduce en peso y cuerpo de las voces, sobre todo masculinas. Aquí entramos ya en los gustos y preferencias de cada oyente, pero sí es verdad que las voces a pesar de tener un buen grado de detalle y articulación pueden dar la sensación de quedarse algo finas en cuanto a plenitud y cuerpo, sobre todo si estamos escuchando los Oppo con nuestro smartphone o un reproductor dedicado que no tenga una buena cifra de potencia con la que alimentar debidamente a estos auriculares. Que no nos olvidemos se tratan de unos drivers planarmagnéticos, con una capacidad de potencia de entrada en torno a 0,5 W sin mayor problema. Mostrándose bastante más cómodos bajo una amplificación dedicada, consiguiendo una zona media con mejor presencia y mayor proyección.
El Oppo PM3 puede decirse que es un grande en cuanto a reproducción de música acústica, clavando casi los punteos de guitarra y con una tímbrica digna de comparativa con los HD600, hasta ahora para mí reyes en este aspecto en su gama.
Muestran muy bien el detalle cuando es necesario pero gracias a la caída intencionada entre los 4 y 8 kHz mantienen alejadas las estridencias y sibilancias a las que pudieran dar lugar incluso grabaciones de no tan buena calidad, si bien no podría denominarlos tampoco como unos auriculares permisivos, por su perfil neutral y transparencia, típicas de un buen driver planar.
En términos de escena alcanza un notable bien merecido, destacando más en amplitud y careciendo ligeramente de una mejor interpretación tridimimensional, equilibrio y coherencia de la escena proyectada en los 3 ejes imaginarios. Así que no los tendría como primeros en la lista de mis opciones si solo fuera a escuchar clásica con ellos, no obstante para el resto de géneros musicales realizan un gran papel.
Oppo PM3 vs. Sonus Faber Pryma
Por hacer una comparativa contra un rival directo como pueden ser los Sonus Faber Pryma, que ya analicé hace algunas semanas, he de comentar que estos últimos suenan menos neutros y con una mayor coloración sobre todo en la parte del medio-grave.
Con un sonido más rápido en transitorios y un punto de mayor claridad los Oppo PM3 parecen menos velados en la zona media que los Sonus Faber, ya que estos guardan una rica y embaucadora tonalidad que cae ligeramente hacia el sonido «romántico»o con un punto cálido, algo así como el caso de los Focal Spirit Classic, que también podrían entrar en este perfil sonoro.
En cuanto a escena encuentro una mejor coherencia en los Pryma, y eso los convierte en mi elección para música orquestral e incluso Jazz, ya que logran una mayor conexión con el oyente con un perfil que se aleja algo más de lo neutral.
El grave en los PM3 es más rápido y con una mayor pegada física (debido a la tecnología empleada), casando mejor con música más actual, electrónica y rock, donde una vez bien emparejados y alimentados sorprenden hasta el oyente más exigente, sobre todo si tenemos en cuenta la calidad de este auricular en todos los otros apartados.
Conclusiones
Los Oppo PM3 son de esos auriculares que logran el notable en todo, y a los que no se les puede achacar nada. Como dirían los ingleses son un fantástico «all arounder». Gran diseño y construcción, excelente sonido y todo con la garantía de Oppo. ¿Qué más se puede pedir?
Hace muy poco que Oppo se ha adentrado en el mundo de los auriculares, y viendo el éxito de este modelo no puedo estar más expectante a lo que está por llegar…
Gracias a todos por vuestra lectura, y nos vemos en la próxima review, más pronto que tarde,
Yago.
Los tango y coincido al 100 % con tu maravilloso análisis 😁😁😁
Estoy encantado con ellos suenan perfectos, sin añadir ni quitar nada sin nada de distorsión en todo el rango dinámico.
Los nuevo con Fiio 7 ll gen.
Hola Juanjo,
Me alegra saber que coincidimos 🙂
Siguen siendo a día de hoy unos auriculares muy a tener en cuenta, sobre todo si te gusta el sonido con respuesta neutral y equilibrada.
Te animaría a probarlos también con un buen amplificador estacionario, te sorprendería su capacidad de mejora alimentados con algo más potente.
Un saludo,
Yago.
yo me hice de unos hace poco…………….Hablemos ahora de las marcas poco conocidas y que fueron líderes en lo que se conoce ahora como SONIDO HI-RES.
Hace poco logre adquirir unos auriculares de esa marca en un muy buen precio. Los vendía alguien en algo así como segunda mano. El modelo fue el PM-3 de OPPO.
Ya los había probado hace cerca de un año en una exposición de electrónica de audio aquí en Finlandia. Me gustaron mucho y cuando vi el precio solo pensé; bueno, al menos ya los probé y escuché.
Así que el precio en que los conseguí fue bueno considerando el precio de esos auriculares nuevos y que una o dos tiendas tienen a la venta. Así que me cité con el vendedor y este tenía todo sus empaques así como todo lo demás.
Se notaba que el vendedor los había cuidado con mucho esmero y que los había comprado tan solo el año anterior en un precio de tienda. El había esperado cerca de dos semanas en poderlos recibir en su casa ya que la tienda no los tenía en existencia. No resistí la tentación y logre hacerme de ellos después de llegar a un buen arreglo.
Llegando a casa los pude mirar bien y en todo detalle. No tenían un solo rasguño y también admiré su driver de construcción plana, pero no me atreví a desmontarlo por temor a desajustar los magnetos.
Lo que más me gustó es que funcionan muy bien con cualquier reproductor, teléfono o amplificador de casa. No disminuye el volumen ni tampoco resultan exagerados los tonos bajos. Cosa que es notoria en todos los audífonos que usan este sistema plano. Por lo que según me dijo el vendedor eran los que usaba para la edición de sonido que es a lo que se dedicaba hasta hace poco.
Le pregunté porque los vendía y me contesto que ya no trabajaba en esa rama y que ahora quería comprarse unos audífonos con conexión bluetooth. Le pregunté la marca y modelo que tenia pensados en adquirir. Y resulta que ahora quiere unos Bang & Olufsen H9i. me guardé mi opinión y le agradecí.
Camino a casa, cargando la caja y todo lo demás de los nuevos audífonos. Me dio por pensar en que acababa de comprarle un auto Jaguar ultimo modelo impecable, a alguien que solo quiere ahora un coche hibrido.
Buscando en internet todo lo referente a la marca y modelo me enteré que la compañía les daba las gracias a todos sus clientes.
En esta ocasión hablaremos de la marca OPPO. Pero no precisamente de aquella que fabrica teléfonos móviles. Más bien de una división de esta llamada OPPO DIGITAL. Esta compañía comenzó en el año 2004 en California Estados Unidos. Trabajando independientemente de su matriz BBK electronics, que también es dueña de la otra división que fabrica teléfonos móviles. Esta división establecida en California. Empezó con la idea de vender productos de audio enfocados a un consumidor muy exigente. Y les fue muy bien en cuanto a convertirse en una marca de culto en los reproductores de Cds, DVDs. Blueray players y también incursionó en la electrónica de audio personal.
Tiempo después se propusieron el fabricar uno de los mejores audífonos en el mercado pero que pocos podían pagar. Tal fue el caso del OPPO PM1. , que es uno de los pocos auriculares que aun usa la tecnología llamada ORTODINAMICOS, es decir Sistemas de auriculares planos ó Planar technology. donde el rey ahora es uno de los pocos que aun utilizan esta tecnología.
Bien. Hace tres años sacaron el modelo OPPO PM1, que resultó todo un éxito en cuanto a prestaciones se refiere. Salieron con un costo de cerca de 1500 euros. En ese modelo todo era un lujo: almohadillas de piel de cordero. Drivers planos de más de 5.5 centímetros. Soporte de metal de aluminio anodizado, cables extremadamente fabricados con el más puro cobre y trenzado de manera de reducir el ruido magnético ambiental. Y con un estuche de madera laqueada. Todo era un lujo en ese primer modelo.
Pronto lograron colocarse en los espacios de culto donde los audiofilos exigentes y con dinero buscan solamente lo mejor.
Pues bien esta marca decidió terminar sus operaciones, no por quiebra, no por dejar de ser competitiva. Más bien ante el avance inevitable de la tecnología que ahora impera en el mercado mundial de la música.
Hoy en día la gente compra menos y menos compactos de música. Esa gente ha emigrado a otras plataformas, como Spotify, Soundcloud. Itunes. Por lo mismo la gente ha dejado de buscar reproductores de Cds, de DVDs, de Blueray. Y por lo mismo ya no es rentable el ser los mejores en cuanto a calidad de sonido, así como tampoco en los auriculares. Hoy en día uno le puede preguntar a cualquiera de nuestros conocidos que tipo de música escucha y probablemente pocos serán los que aun compran CDs.
Ahora bien, no piensen que con la música de ahora se requiere mucha calidad de sonido. Eso es una total distorsión de la realidad. Hoy en día basta con un tipo que sepa usar bien un teclado de música y con ese teclado puede crear todos los sonidos que pueda aun a pesar de no ser un melotron o un sintetizador de los buenos. Acaban componiendo canciones con muy poca calidad de sonido. Esto es fácil de distinguir. Antes escuchábamos a una banda ejecutar sus instrumentos acústicos hasta donde era posible. Se podían escuchar los sonidos de la batería y hasta se podía distinguir perfectamente cuando sonaban los platillos de la batería. O de unos buenos timbales. Escuchábamos unos sonidos bajos de buen colorido y eso nos hacía pensar en que el escuchar la música en vivo sería lo máximo por ese entonces.
Un amigo que le gusta el regatón me dijo escuchar su música y para esto use unos audífonos de una calidad de sonido bastante buena; todo sonaba muy plano. Pensé que tal vez era porque esa música la estaba escuchando en su teléfono móvil conectado a Spotify. Me propuse buscar esa misma melodía en formato FLAC. Lo cual resulto un poco fácil en función de que muchos compartimos nuestra música en estos días. Volví a escuchar esa melodía y resulto exactamente igual de plana. Sonaba la batería. Pero seguramente la batería del teléfono, ya que toso se escuchaba plano. Los agudos resultaban ejecutados por un teclado así como los sonidos medios y bajos. Eso sí, la calidad de sonido vocal era muy buena. Pero en general daba pena el escuchar esa música.
Ese amigo me mostro un video del cantante y buscamos donde lo habían grabado o realizado el máster de la música. Resulto que solo había sido un tipo que hizo la música con su teclado (no sé si a esto se le llame músico. Solo toca un teclado). Platicando con este amigo y comentando el sonido y usando mis audífonos, le pregunté si notaba diferencia alguna en sus audífonos BEAT y los míos que son unos Fidelio X2. Para lo cual no notó la diferencia (yo tampoco debo de confesarlo) el sonido resultaba todo plano. Fuerte pero plano. Ahora entiendo el porqué la marca OPPO decidió cerrar su producción.
aqui les dejo el enlace del video de este modelo. https://youtu.be/ZGVv5_h7qvY